domingo, 21 de octubre de 2007

Decisiones…


Me parecen interesantes esas situaciones en las cuales te das cuenta de algo que siempre ha estado presente en tu vida y nunca antes lo habías notado. A mí me paso leyendo una lectura recomendada de ética. Se trataba principalmente de la contingencia de las acciones humanas. El principio fundamental en el que se basaba era que todo asunto humano está en el plano de lo que pudo haber sido de otra manera, es decir que siempre tenemos otras alternativas y no solo la que elegimos. En otras palabras, toda decisión pudo ser diferente y por lo tanto somos responsables en menor o mayor medida de las consecuencias de nuestros actos.

Lo interesante de esta reflexión es que hay algo presente en la mayoría de los seres humanos que nos hacen olvidar este principio, esto es la tendencia a la auto justificación, que todos alguna vez en la vida hemos utilizado. Las personas buscamos cualquier motivo para hacer menos mala o más entendibles cada una de nuestras acciones por más tontas o irracionales que sean. Estas justificaciones no consisten en mentiras necesariamente, pero hay que tener presente que las personas tendemos a manipular las situaciones y voltearlas o arreglarlas a nuestro favor.

De verdad, esto es algo muy presente en la vida diaria y los invito a analizar sólo uno de sus días y van a encontrarle una buena justificación para cada uno de sus ‘actos negativos’. Ya me veo comenzando por: ‘Me levante tarde, ya que no podía dormir ayer por la bulla que hacían los vecinos’, ´no leí la lectura porque estaba muy tediosa y aburrida’ o simplemente ‘llegue tarde porque el carro se demoró’…Con todo esto no estoy insinuando que TODO depende de nosotros, ya que no tenemos control absoluto de todas las cosas que nos pasan, pero me mantengo firme en que siempre podemos elegir y tenemos responsabilidad de las decisiones que tomamos frente a todas las circunstancias que nos presentan. En lugar de dar pretextos, que es más cómodo y nuestra mente los maquina más rápido (asumiendo que son algo propio de nuestra naturaleza), deberíamos aceptar las verdaderas razones que tuvimos para actuar de esa manera (aunque a veces no hay razones racionales) .

La próxima vez que me pregunten: Cristina, ¿Por qué llegaste tarde a nuestra reunión a las 7:30 a.m? que se sepa que fue porque soy demasiado dormilona como para levantarme temprano…

martes, 9 de octubre de 2007

Una chica, dos celulares...



Esta es una de las circunstancias irónicas de la vida relacionada con la tecnología. Hace poco tiempo, mi celular se apago de la nada...yo no entendí el porqué, así que mi tío lo llevo a reparar y el técnico detecto que había una falla irremediable en la pantalla que solo podría ser solucionada con un cambio de esta, lo cual resultaría muy costoso. Así q mi mamá decidió regalarme un nuevo celular, ya que se acerca mi cumpleaños. Luego de haber comprado mi nuevo celu, yo no dejaba de extrañar el anterior, es que había desarrollado cierto vínculo con él.
Creo que a veces podemos sentir cierto afecto por los objetos, no sé si les pasa a todos, pero quizás son las circunstancias, las experiencias, los anécdotas o los hechos a los que nos recuerdan lo que nos hace sentir ese ´cariño`. Puede pasar con ropa, calles, comida, libros y hasta canciones...¿Hay miles de cosas, verdad? sólo que casi nunca no nos damos cuenta de lo que valen hasta que las perdemos o quizás las damos por olvidadas hasta que las volvemos a encontrar de casualidad.
Para mi suerte, mi celular anterior volvió a la vida luego de que lo tire al piso usando una simple analogía: `si se malogro a causa de un supuesto golpe, también se tiene que arreglar con otro´...Ahora tengo dos celulares y pienso si será cierto ese dicho: `Más vale viejo conocido que bueno por conocer´, pero analizo más a fondo las cosas y me doy cuenta que ese dicho es demasiado cerrado al progreso y a todo lo bueno que puede traer este consigo.
Será momento de dejar los recuerdos atrás y mirar hacia adelante...

sábado, 6 de octubre de 2007

Aparta de mí las tostadas!!!

César Vallejo escribió ‘España, Aparta de mí este cáliz’ basándose en la Guerra Civil Española. Según Nietzsche, los seres humanos albergamos en nuestro interior dos fuerzas opuestas que se encuentran en constante guerra, estas son la tendencia al orden (Impulso Apolíneo) y la tendencia a la desmesura o caos (Impulso Dionisiaco).No se el porqué pero últimamente me siento tan descontrolada…tanto así que estoy comenzando a dudar de la autonomía que debería tener gracias a mi Razón. Creo que a todos nos pasan esas situaciones en las que SABEMOS QUE NO DEBEMOS, pero aun así no podemos o simplemente no queremos dejar de hacerlo. Esto puede manifestarse en hechos tan sencillos de la vida cotidiana, puede ser en forma de ansiedad como me ocurre a mí con las ‘benditas tostadas’, con la adicción al MSN o los juegos o como obsesión al no poder quitarse una idea de la cabeza o hasta a veces hasta con el amor…hay tantas formas y son tan diversas. Una sola persona puede experimentar estas situaciones conflictivas en los distintos ámbitos de su vida.
Tú quieres parar, te repites constantemente que eso no es bueno para ti, que debes dejarlo, que ya escapo de los límites de lo normal, pero hay una fuerza que te mantiene allí, ¿Será acaso una tendencia a la autodestrucción? A veces es tan difícil mantener la moderación, es tan complicado controlarnos. Y yo no puedo dejar de preguntarme ¿Dónde está en ese momento la Razón que debe ayudar a dominar mis deseos y sentimientos?, ¿Hasta qué punto realmente soy dueña de mí? Confió que con el tiempo pueda lograr descubrirlo…

viernes, 5 de octubre de 2007

Entre la trilogía: Venganza, Justicia y Perdón


Hace poco tiempo estuve leyendo a una autora llamada Hannah Arendt. Ella fue una judía sobreviviente del Holocausto, que tuvo que huir de Alemania porque fue impedida de ejercer la docencia en ese país y además fue testigo de los terribles maltratos que sufrió su pueblo durante el régimen nazi, nos habla de tres alternativas de reacción frente a un agravio.

La primera de ellas es LA VENGANZA, que consiste en querer que la persona que nos hizo daño sufra tanto o más que nosotros para que pague por lo malo que nos hizo. Esta reacción es la más esperada frente a un acto que nos lastima y creo que casi todos hemos experimentado ese deseo alguna vez. Pero, albergarlo en nuestra mente nos destruye y nos encierra en una especie de círculo vicioso por el cual lo único que hacemos es buscar situaciones que nos ayuden a recordar lo malo, nos encierra en el pasado y hace que este siempre repercuta en nuestro presente.

LA JUSTICIA, lo que busca es dar un castigo justo a la persona agresora. Ni más, ni menos de lo que se merece, el término medio, lo adecuado y preciso según la gravedad. Si cayera en la benevolencia, las personas agraviadas no se sentirían satisfechas y si se excediera en la sentencia no se les daría el trato debido a los culpables. Yo creo que esta es una muy difícil labor, ya que es complicado encontrar una sentencia adecuada y muchas veces es complejo poder hacer justicia sin que se convierta en venganza o simplemente hay muchos agravios que no son juzgados. No obstante, debemos admitir que el hecho de que se haga justicia nos hace sentir más ‘aliviados’ y tranquilos.

Por último, el tercer elemento de esta trilogía es EL PERDÓN; es la acción menos esperada, ya que cuando te ofenden generalmente exiges justicia o tienes deseos de venganza. Se podría decir que es una reacción impredecible y ‘antinatural’ frente a un agravio.Y generalmente se logra después de que se hizo justicia o la convicción de que el pasado es irreversible y así se tenga almacenado mucho reconcor los hechos no podrán ser cambiados y el perdón permite de alguna manera que la vida prosiga, ayuda a liberarse de la venganza.

Constantemente nos encontramos entre estas tres alternativas y nos corresponde elegir la que consideran mas adecuada.Solo me queda agregar que los invito a analizar su historia de vida,a reconciliarse con su pasado,para así poder liberarse de él y evitar que este determine sus vidas.No es una misión nada fácil, pero tampoco imposible :D

jueves, 4 de octubre de 2007

La historia del pollito


Hay ideas que te vas formando según tus experiencias y la forma en la que se desarrolla tu vida durante el tiempo. Esta es una de mis principales ideas sobre el amor y quisiera compartirla con ustedes. Resulta que una vez mi mamá me hizo una analogía entre un pequeño pollito bebe y un hijo. Me dijo que cuando tú tienes un pollito siempre quieres protegerlo, cuidarlo, tratas que sienta todo el cariño y protección que le puedes dar, pero si lo abrazas mucho lo único que vas a lograr es apretarlo tanto que se sentirá incomodo o, en el peor de los casos, morirá asfixiado.
Esta metáfora me hizo reflexionar mucho sobre mi concepción del amor, ya que siempre he sido una persona muy celosa.
Cuando quieres a alguien sucede exactamente lo mismo que en la metáfora, por alguna razón siempre tratas de mantenerte cerca de la persona que amas, tratas de que esa persona sienta tu presencia, intentas a toda costa que se de cuenta del inmenso cariño que le tienes… pero ¿Hasta que punto esto es saludable en una relación?, ¿Cómo podemos evitar asfixiar a nuestra pareja?, ¿Cómo podemos darnos cuenta de que nuestra actitud esta fuera de los limites normales?
Como diría Aristóteles, todo es bueno mientras no caiga en el defecto o en el exceso. En pocas palabras, deberíamos buscar el termino medio, el equilibrio, el ´ no mucho, no poco’ creo que esa es la mejor manera de mantener una relación, ya que no es bueno restringir las libertades de nuestra pareja sofocándola y tampoco es saludable la indiferencia estoica.
Lo que puedo agregar es que hagas lo que hagas para evitar que alguien deje de hacer algo, si esa persona no lo hace solo por presión y no por convicción…ningún esfuerzo valdrá la pena, ya que él que quiere hacer algo, encuentra el lugar, la excusa y el momento para hacerlo.Al final de cuentas sólo eres responsable de tus acciones y no de lo que hagan los demás...Aténgase cada quien a su conciencia!

lunes, 1 de octubre de 2007

'De mi castellano su hablar'


Durante muchos años se ha etiquetado a cierto grupo de personas como 'la gente que habla mal' solo por el hecho de no seguir con lo establecido convencionalmente. Hay tres tipos de variaciones lingüísticas que se manifiestan en el día a día y sólo cuando nos topamos con las personas que hablan 'diferente' las podemos apreciar...Pueden ser de tres tipos: Vocabulario, podemos llamar de distintas maneras al mismo objeto, tal es el caso de decir palta o aguacate. Estructura gramatical, como 'De mi hermano su carro'(Selva), 'Mi hermano de su carro'( Sierra) y El carro de mi hermano(Costa). Por ultimo, otra variación se da en la pronunciación, de la cual muchos de nosotros nos hemos burlado alguna vez en la vida refiriendonos al 'mote' o 'dejo'.
Como podemos ver todas estas oraciones tienen distinto orden pero transmiten el mismo mensaje y esto es lo rico del lenguaje, ya que cada persona cuenta su historia a su manera y mientras pueda ser entendida por los demás, NO hay argumentos cientificos que lo juzguen y lo discrimien por considerarlo inferior.Debemos dejar de lado esos tontos prejuicios y aceptar nuestras diferencias para así poder reconocernos como cuidadanos de la misma nación...La diferencia enriquece, no debe avergonzarnos...