jueves, 26 de junio de 2008

Soledad en invierno...

Cuando uno tiene enamorad@ y todo es paz y felicidad no se hace mayores problemas. En el modelo ideal, uno asume su costo de oportunidad (se renuncia a todas las demás opciones al decidirse por una) con la creencia de que esa persona maximiza nuestra utilidad (leáse felicidad-Bienestar).

En cambio, cuando andas solo y libre por la vida las cosas pueden complicarse un poco, aunque esto no debería pasar.
La soledad se presta para los malos pensamientos, tanto así como la ociosidad (Recuerden el refran 'La ociosidad es la madre de todos los vicios'). Al no sentirte 'atado' o comprometido con alguien, tu libertad parece no tener límites. Puedes salir con quién quieras,cuando quieras, en el plan que quieras. Puedes darte el lujo de mirar todas las alternativas disponibles y también no disponibles. Puedes coquetear con quién quieras sin sentir remordimientos.Puedes salir con varias personas a la vez sin que se te juzgue por ello (Si dejas en claro que sólo son amigos). No tienes que compartir tu tiempo libre necesariamente con alguien en especial, puedes salir con l@s amigas de compras, a bailar, a conversar, a comer postres, etc. sin tener una voz diciéndote ‘Tú no te das tiempo para mi’ y una serie de recriminaciones o cuestionadoras preguntas( ¿los prefieres a ellos o a mí?), etc.
Puedes hacer y deshacer tu mundo entero, sin que afecte a alguien directamente.

Sin embargo, si todo fuera como lo describí en lineas anteriores NADIE cometería la locura de comprometerse con una relación. No sé si se debe a nuestra naturaleza social, a la necesidad de afecto o simplemente que 'la cabra tira para el monte'. Sea lo que sea, hay algo que hace que nuestras feronomas se combienen bien con las de alguien del sexo opuesto (en el modelo ideal) y nos anime a aventurarnos nuevamente en el complicado camino del amor.

No sé si es el invierno, o qué será que hace que los cuerpos requieran calor extra, que no se puede compensar con un chocolate o cigarro y se necesita más (Eso explicaría las comelonas compulsivas).Puede ser que a veces se extraña ser cobijad@ por los brazos de alguien, se sienten ganas de escuchar frases bonitas, recibir y dar caricias tiernas.

Aunque en realidad la mayoría de veces te convences o te demuestras que no hay nada mejor que estar contigo mismo y que nadie vale el precio de tu libertad o puede que no quieras volver a pasar por el trauma que resultó el final de tu relación anterior y terminas convenciendote de que no eres buen@ en el amor. Al final de cuentas, creo que tal vez solo falta que llegue ´´ese alguien especial'' que valga la pena y deshaga todos tus prejuicios y temores.

miércoles, 25 de junio de 2008

Hoy llovió en Lima

Lima la gris, la llaman algunos. Lima la antigua, le dicen otros. Lo cierto es que en Lima no estamos acostumbrados a ver grandes gotas de lluvia mojar nuestras calles, nuestros techos no están listos para desfogar el agua empozada y ninguno de nosotros camina con paraguas.
Hoy mientras caminaba bajo la lluvia recordé a Cortázar, sentí nostalgia y pensé en la letra de este poema(Que es buenisímo,dicho sea de paso).

Aplastamiento de las gotas (Julio Cortázar)


Yo no sé, mira, es terrible cómo llueve. Llueve todo el tiempo, afuera tupido y gris, aquí contra el balcón con goterones cuajados y duros, que hacen plaf y se aplastan como bofetadas uno detrás de otro, qué hastío. Ahora aparece una gotita en lo alto del marco de la ventana; se queda temblequeando contra el cielo que la triza en mil brillos apagados, va creciendo y se tambalea, ya va a caer y no se cae, todavía no se cae. Está prendida con todas las uñas, no quiere caerse y se la ve que se agarra con los dientes, mientras le crece la barriga; ya es una gotaza que cuelga majestuosa, y de pronto zup, ahí va, plaf, deshecha, nada, una viscosidad en el mármol.


Pero las hay que se suicidan y se entregan enseguida, brotan en el marco y ahí mismo se tiran; me parece ver la vibración del salto, sus piernitas desprendiéndose y el grito que las emborracha en esa nada del caer y aniquilarse. Tristes gotas, redondas inocentes gotas. Adiós gotas. Adiós.


Nosotros somos como las gotas, algún día nos tocará caer. Los días lluviosos, en especial,me hacen pensar en qué tipo de gota soy...Una que se deja caer u otra que se aferra.Y tú, ¿Cómo piensas que eres?

***Esta canción de Shakira se presta para describir algunas emociones del día.

miércoles, 18 de junio de 2008

No me des falsas esperanzas

Al ver caras de decepcionante estupefación, le pregunte a mi hermano que pasaba y me dijo:

¿Adivina con cuanto perdiMOS en el partido?
Bueno, supongo que 2 a 0, lo que ya mostraba mi desconfianza en el equipo.
No, SEIS A CERO. Es una vergüenza, me respondió.
Oh, por Dios. ¿De verdad?
Sí, de verdad, me repitió 6 a 0.

Esta es una de las desgracias a las que nos tiene acostumbrados el fútbol peruano y tiene un poder que hasta yo, que nunca he sido fanática de ningún deporte, me sienta realmente avergonzada.
Cada vez que juegan, el masoquismo se hace parte del colectivo nacional al ver cada gol anotado por el equipo rival.
El inicio de una nueva temporada en las ultimas tres décadas(mas o menos) no dejan de darnos falsas esperanzas con un triste empate o un seudo ‘triunfo’ que nos vuelve a ilusionar y luego nos regresa a los deprimentes resultados de 1 a 0, 3 a 0, 6 a 0, etc.
‘No meten ni un gol por el honor’, escuchaba decir angustiados como si en esa cancha de fútbol se jugara el honor nacional, el orgullo nacional y hasta la honra de cada uno de los peruanos.
Yo no entiendo por qué el fútbol es capaz de deprimirnos a todos los peruanos, hacernos sentir fracasados, a pesar de que no somos nosotros los que estamos ´sudando la camiseta`. Entiendo que esos futbolistas son los `seleccionados`, en teoría los mejores jugadores y por ello nos representan a todos nosotros.

Al menos yo no identifico con el tipo de gente que no se toma en serio su trabajo, que sólo juega bien en el extranjero y aprovecha sus estadías en el Perú para llenarse las venas de alcohol y divertirse en fiestas privadas cuando deberían estar en concentración.
¿No les parece que deberíamos dejar de torturarnos? He escuchado comentarios que van desde echarle la culpa al entrenador , hasta gente que quiere que el quipo se retire antes de seguir haciendo el ridículo. Yo creo que debemos hacer una guerra subliminal contra tal mediocridad, olvidarnos del día de los partidos, no encender ni el televisor ni la radio hasta el día en que nos brinden el futbol de calidad que merecemos. Debemos dejar de lado esa creencia tonta de que lo importado es lo mejor y que lo que funciona en el extranjero funcionará de la misma manera aca.
A estas alturas del partido la FPF debe ´volver a sembrar`, poner más atención en los nuevos talentos y formarlos para que sean profesionales en el deporte y no sólo jugadores famosos que se dejan embriagar por aquella sensación que produce el reconocimiento publico.
Ya no quiero ver a mi país decepcionado por un tema tan vano. Lo que necesitamos son razones para sentirnos orgullosos y recuperar la confianza en el Perú, que de seguro que tiene muchos talentos que aún no han sido descubiertos.

lunes, 2 de junio de 2008

Una patética historia de amor

Esta es la historia de una chica que estaba dispuesta a enamorarse. Pero, esta chica no era como las demás, ella no veía el amor como algo pasajero así como sus amigas. Ella estaba dispuesta a enamorarse con todo el corazón, estaba lista para creer en cada palabra de amor, a valorar cada detalle de cariño, cada beso, cada caricia.
Resulta que aquella chica escogió a su príncipe azul y él se portaba como en los cuentos de hadas. Era todo un caballero, tan inteligente, responsable, respetuoso y lo más importante: ella se sentía segura a su lado, tan querida que nada podía arruinar su felicidad. Su sueño se había hecho realidad y aunque solo tenía 16 años, sabia en el fondo de su corazón que quería quedarse con él para siempre.
Como imaginarán, esta historia no tiene el final de un cuento y los problemas, aunque tardaron,llegaron. El chico casi perfecto comenzó a transformarse y dejo de ser transparente y honesto como lo era antes...La chica se había aferrado tanto a él que le costaba mucho trabajo resignarse al cambio. Hasta que al final optaron por separarse y fue la etapa más traumática de su vida.
Lo peor de esta historia es que después de una temporada el chico vuelve a aparecer en su vida, como si nunca se hubiera ido, como si nada hubiera pasado o cambiado. Vuelve él, diciendo que está arrepentido, que fue un tonto y ella, que si es tonta e ingenua, lo acepta y el círculo vicioso empieza otra vez.

A veces quieres deseperadamente encontrar un gran amor, deseas con todo tu ser convertirte en alguien tan importante para el otro o al menos quieres que piense en ti, que te recuerde, aunque sea de vez en cuando.

Aqui la canción que me hace pensar en este tipo de patologias. Think of me...(La canta David Archuleta)