jueves, 4 de octubre de 2007

La historia del pollito


Hay ideas que te vas formando según tus experiencias y la forma en la que se desarrolla tu vida durante el tiempo. Esta es una de mis principales ideas sobre el amor y quisiera compartirla con ustedes. Resulta que una vez mi mamá me hizo una analogía entre un pequeño pollito bebe y un hijo. Me dijo que cuando tú tienes un pollito siempre quieres protegerlo, cuidarlo, tratas que sienta todo el cariño y protección que le puedes dar, pero si lo abrazas mucho lo único que vas a lograr es apretarlo tanto que se sentirá incomodo o, en el peor de los casos, morirá asfixiado.
Esta metáfora me hizo reflexionar mucho sobre mi concepción del amor, ya que siempre he sido una persona muy celosa.
Cuando quieres a alguien sucede exactamente lo mismo que en la metáfora, por alguna razón siempre tratas de mantenerte cerca de la persona que amas, tratas de que esa persona sienta tu presencia, intentas a toda costa que se de cuenta del inmenso cariño que le tienes… pero ¿Hasta que punto esto es saludable en una relación?, ¿Cómo podemos evitar asfixiar a nuestra pareja?, ¿Cómo podemos darnos cuenta de que nuestra actitud esta fuera de los limites normales?
Como diría Aristóteles, todo es bueno mientras no caiga en el defecto o en el exceso. En pocas palabras, deberíamos buscar el termino medio, el equilibrio, el ´ no mucho, no poco’ creo que esa es la mejor manera de mantener una relación, ya que no es bueno restringir las libertades de nuestra pareja sofocándola y tampoco es saludable la indiferencia estoica.
Lo que puedo agregar es que hagas lo que hagas para evitar que alguien deje de hacer algo, si esa persona no lo hace solo por presión y no por convicción…ningún esfuerzo valdrá la pena, ya que él que quiere hacer algo, encuentra el lugar, la excusa y el momento para hacerlo.Al final de cuentas sólo eres responsable de tus acciones y no de lo que hagan los demás...Aténgase cada quien a su conciencia!

5 comentarios:

Katherine Huamán Romani dijo...

Jajajaja venganzaaa

P@0L1t4 dijo...

La verdad que tienes razon y bueno siempre se debe dar cierta libertad a la pareja, pues, si el "amor" es verdadero...nada ni nadie podrá interponerse en el camino...there's one of the things i've learned until now...

Anónimo dijo...

todo lo que dices es cierto,no se debe caer n el defecto ni en el exceso .........yo tambien soy una persona super celosa, necesito terapia jajjaa...muy buenio el artículo he hecho un articulo nuevo leelo su deseas . bye besos

Cristina dijo...

No Paola, no se debe dar CIERTA libertad a la pareja.La libertad es algo que todos persee poseemos y no necesitamos que alguien nos la de...Simplemente todo en la vida es libre albedrio y hay que reconocerlo y aceptarlo( incluso en las relaciones de pareja)

Cristina dijo...

No puedo estar más de acuerdo con tus planteamientos. Creo que voy a dejar a mis ídolos Platón, Aristóteles, Kant y Rorty, y seguirte a vos. El amor se entrega por propia iniciativa por el mismo hecho que se da gratuitamente. No se le puede pedir a alguien que no ama que esté dispuesta a sacrificios o gestos que no nacen de él mismo. Una relación marcada por las exigencias, las presiones y los imperativos no contiene amor de verdad.

Luego, me pareció sensacional esto que planteas respecto a las ideas que nos vamos formando. Es cierto, cada uno tiene una forma particular de ver el mundo y entender las dimensiones de la vida. Forma particular que reproduce concepciones consuetudinarias y colectivas, pero que adquiere en nuestra propia experiencia formas precisas de comprensión y objetivación. En esa línea, las imágenes como la del pollito son ejemplos contundentes de nuestra forma muy personal de entender el mundo y la vida.

JME